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sábado | 20 abril | 2024
El alcalde de Neda, Ignacio Cabezón Lorenzo, informó ayer de que el Concello acaba de habilitar una senda peatonal de acceso tanto a la recién inaugurada pasarela sobre el río Belelle como a la piscina municipal y el parque infantil del Galeón.
Los trabajos de acondicionamiento de la vía se llevaron a cabo el jueves de la semana pasada, coincidiendo con el buen tiempo. Se trata de una intervención comprometida tras la conclusión de la construcción de la pasarela de madera. Los operarios municipales, ayudados de una excavadora, aplicaron zahorra en la pista y procedieron a su compactado.
Lamentablemente, unas horas después, en una visita a las obras que realizó el propio Ignacio Cabezón para comprobar el estado de las mismas pudo constatar que la pista estaba “completamente desfeita”. Unos daños fruto de “actitudes pouco cívicas”, como indicó el regidor municipal. Al parecer, según las pesquisas policiales la pista recién cubierta de zahorra la emplearon para hacer trompos. Por todo esto, tras los últimos trabajos acometidos el lunes para dejar lista la pista se ha decidido limitar el acceso rodado a la misma.
Internet y redes sociales
En otro orden de asuntos, el Concello de Neda informa de que esta tarde tendrá lugar en el local de la Casilla do Puntal una de las charlas que se enmarcan en el programa “Maior seguridade”. Se trata de una iniciativa que promueven conjuntamente el Concello y la Guardia Civil que busca ofrecer información sobre posibles peligros a los que puede enfrentarse los ciudadanos día a día. Anteriormente se ofreció una charla dirigida a los vecinos de más edad.
Bajo el título “Os perigos de internet e as redes sociais”, la sesión será impartida por personal formador del instituto armado y dará comienzo a las 17.30 horas, con entrada libre y gratuita. El objetivo de la misma es ofrecer información sobre los peligros que puede haber detrás de internet y la necesidad de proteger la identidad y privacidad personal, muy concretamente a la hora de colgar fotografías y vídeos, que pueden acabar en manos de ciberdelincuentes o acosadores.
