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viernes | 19 abril | 2024
La iniciativa H2Pole, una planta de hidrógeno verde promovida por Reganosa y la firma lusa EDP Renovaveis en el municipio de As Pontes, ya es oficialmente el primer proyecto industrial estratégico de Galicia. Ayer mismo, el Consello da Xunta aprobaba la declaración que otorga a esta propuesta esta denominación, enmarcada en la Lei de simplificación administrativa, que permitirá reducir los plazos de tramitación a la mitad “mantendo todas as garantías xurídicas durante o procedemento”.
Tal y como se explicó desde el gobierno gallego, para obtener esta declaración, las empresas candidatas deben cumplir dos de los tres requisitos fijados por la Xunta: un volumen de inversión mínimo de veinte millones de euros; la creación de al menos un centenar de puestos de trabajo; y que “complementen” las cadenas de valor de su sector o que pertenezcan a áreas económicas consideradas “estratéxicas” y alineadas con los objetivos de la Unión Europea o que se integren en las líneas de financiación de los fondos Next Generation. En el caso de la futura planta pontesa, se cumplen el primero y el tercero.
Tal y como se explicó durante la presentación del proyecto y ayer recordó la Xunta, la iniciativa H2Pole no se limita a la creación de una planta de desarrolllo de hidrógeno verde, sino que contempla todo el complejo de producción y suministración de esta forma de combustible.
Con una inversión de 156 millones de euros, H2Pole incluirá, además de la propia factoría, las líneas y subestaciones para la alimentación eléctrica renovable de la misma y las canalizaciones para la distribución del hidrógeno. Asimismo, el proyecto contempla la creación de unos 60 empleos directos, a los que se sumarían, según las empresas promotoras de la iniciativa, otros 2.500 indirectos. De igual forma, la administración autonómica incidió en que esta propuesta también es susceptible de recibir financiación de los fondos Next Generation.
Por otro lado, en lo referente a la continuidad de la central térmica de la villa, condicionada por las conclusiones de un informe solicitado a Red Eléctrica –como gestora del sistema energético nacional–, por el momento no hay novedades.
Tal y como aseguró ayer el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, el ejecutivo central continúa sin recibir el mencionado documento, por lo que, a día de hoy, el futuro de la planta pontesa continúa siendo una incógnita. Y es que, si bien desde la Xunta y el Concello de la villa se mostraron favorables a la continuidad de la producción, el Ministerio de Transición Ecológica la ve como el peor de los escenarios. La propia ministra, Teresa Ribera, señaló recientemente que, si bien es una medida que no se descarta, la reactivación no sería especialmente positiva, dado que el precio del carbón ya es superior al del gas y el Gobierno debería cubrir dichos costes.
