El periodo de consultas abierto tras anunciar la propiedad de Guidoni Quartz su intención de aplicar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo –ERTE– de seis meses finalizó sin que hubiesen acercado posturas, con lo que, tal como figuraba en el documento original, comenzará este miércoles, día 25, para un grupo de 31 trabajadores, aproximadamente la cuarta parte del total de la plantilla que tiene la compañía en el polígono naronés de As Lagoas.
El comité de empresa manifestó su decepción con la compañía, de capital brasileño, por no haber accedido a ninguna de sus peticiones, principalmente las relacionadas con el complemento salarial y el consumo de la prestación por desempleo.
Además, según explicó ayer el presidente de la representación social, Iván Gorgullo, la regulación se pone en marcha sin que se sepa si van a rotar “nin cando o farán. Non hai ningún calendario para saber quen irá nin cando”. La firma, como se recordará, alega causas económicas y productivas.
En la práctica, las instalaciones de As Lagoas, que están dedicadas a la fabricación y corte de aglomerado, cerrarán una línea de producción, la denominada “jumbo”, que es la que mayoritariamente está suministrando al mercado estadounidense. Desde hace algún tiempo han dejado de llegar encargos y la plantilla percibía que algo estaba fallando, aunque no se esperaban esta medida.
A pesar de que en estos momentos no hay todavía una decisión firme por parte de la Administración Trump con respecto a los productos que no sean el acero y el aluminio –que ya han sufrido un incremento de la carga impositiva–, la relación comercial de los clientes norteamericanos con la planta naronesa se ha enfriado ante el temor de que en cualquier momento se produzca esa subida de los aranceles que haga inviable o, al menos, poca atractiva la importación de este tipo de aglomerados.
El diputado del Bloque Nacionalista Galego Mon Fernández ha presentado en el Parlamento autonómico una iniciativa en la que demanda la intervención de la Xunta para “garantir o mantemento do emprego e da actividade” en la factoría de Guidoni.
Fernández visitó esta semana las instalaciones, donde pudo reunirse con el comité de empresa, que le trasladó su problemática, agravada por la “política arancelaria de Trump”, si bien también apuntó a la empresa “polo seu desleixo respecto desta fábrica que ten unha importancia limitada dentro dun grupo internacional coma este”.
En 2023 y 2024, las ventas a Estados Unidos de la empresa de As Lagoas supusieron más del 55% de la facturación total. La compañía, que pasó por diferentes etapas con distintos nombres, se inauguró hace 35 años en Narón como Tile Stone.