Que sí, que hay que esperar a la evaluación por parte del Bloque Nacionalista Galego (BNG) de los resultados obtenidos (un éxito en Santiago y en A Coruña) y luego le toca el turno a la asamblea local del partido nacionalista. Pero se cuenta en los pasillos de María Pita, que Francisco Jorquera y sus tres compañeros con acta de edil, tienen muy pocas opciones de entrar en el Gobierno local. Que llegarán a acuerdos puntuales con él los socialistas, pero que hace poco chiste que entren a ocupar alguna de las concejalías. Inés Rey eso lo tiene claro, tan claro que los ediles del Bloque no van a apoyar la investidura de Miguel Lorenzo (PP), que fue la lista más votada en la ciudad. Ana Pontón ya advirtió de que analizarán concello a concello, pero dejó muy claro, salvo que haya indisciplina, que van a evitar por todos los medios posibles que un edil del Partido Popular se haga con el bastón de mando de un ayuntamiento si no cuentan con la mayoría suficiente. Así que Francisco Jorquera e Inés Rey están condenados a entenderse y pasarán un tiempo ‘jugando’ a darse un pulso, pero los nacionalistas saben ya de antemano que la futura alcaldesa quiere un Gobierno en solitario. Veremos.