El actual alcalde pedáneo de Bembrive (Vigo), Marcos Castro González, se sentará como acusado de un delito de prevaricación, por contratar y pagar el suministro de sidra para la fiesta anual de esta entidad local sin seguir los procedimientos y por ordenar el pago de 250.000 euros fraccionados en facturas. El acusado ordenaba los pagos, “a sabiendas del carácter ilícito”, según denuncia la Fiscalía. También es cierto que este año la organización comunicó que se había incrementado el precio por el encarecimiento de la vida. Los gallegos y la sidra no se llevan bien, pero ya van más de veinte fiestas.