el 83% de los autónomos gallegos trabaja más de ocho horas al día y alrededor del 20% no ha disfrutado de vacaciones en el último año. A la hora de iniciarse, lo que más valoran son la capacidad de tomar decisiones, el desarrollar un proyecto y aprovechar el nicho de mercado. También la posibilidad de conciliar y la adecuación a la formación recibida y, por último, el prestigio, la tradición o herencia familiar y la disponibilidad de ayudas. La vida de autónomo es muy sacrificada y mal reconocida por las legislaciones laborales, que los tratan como empresarios cuando son asalariados por cuenta propia.