Un conflicto laboral en el seno de la empresa de limpieza Eulen, derivado de la subrogación de siete trabajadores de la anterior concesionaria, Acciona, desencadenó un “paro técnico” durante toda la mañana de ayer en las instalaciones de Navantia Ferrol. Según informaron varios trabajadores de los astilleros, al comenzar el turno de la mañana se les comunicó que no accediesen a sus puestos de trabajo, dado que las instalaciones “non cumpren cos requisitos para o traballo que indica o plan de convivencia Covid”.
Al parecer, a raíz del conflicto laboral –la compañía no aceptaba subrogar a los mencionados empleados de Acciona al considerar que no cumplían con los requisitos para mantener sus anteriores condiciones de trabajo– no se higienizaron las instalaciones para el turno de la mañana, por lo que las plantillas de la principal y las auxiliares tuvieron que retornar a sus hogares. El propio comité advertía de que dicho paro técnico se extendería o no dependiendo de las negociaciones de los afectados con Eulen.
Apenas unas horas después, el organismo de representación de los trabajadores informaba de que el conflicto ya se encontraba resuelto, que los operarios de la compañía de higienización actuarían de inmediato y que el turno de la tarde podría entrar a trabajar con normalidad. Así, seis de los siete trabajadores afectados habrían logrado que la empresa aceptase la subrogación, mientras que el restante no cumpliría los requisitos.