GAVIIOTAS

Hace tiempo escribía sobre el problema que están planteando las gaviotas. Lamentablemente, ni el gobierno saliente ni el entrante han hecho nada por paliar esta situación, cada día más agravada, incluso sanitariamente. De noche es muy difícil conciliar el sueño por el insoportable y desafinado coro que configuran y, al haber más silencio, destaca más la actuación de las gaviotas. Rompen las bolsas de la basura depositadas para su recogida y extraen de ellas lo que consideran oportuno para alimentarse y dejando todo hecho un asco, agravándose la situación con el calor veraniego. Peligrosa, porque ahora ya atacan incluso a las personas. A un niño le picaron en un dedo provocándole una herida considerable, a otro le llevaron la merienda y atacan a todo lo que les parce. Los nuevos tejados de algunas viviendas protegidas ya están llenos de restos de comida y huesos, con lo que lo gastado no sirve de nada. Como en otros lugares, pedimos una solución urgente y eficaz ante el problema.