Interior

Las pocas luces son consustanciales con el ministerio Fernández D., para tener más tendría que ser de exterior, y en ese caso ya no sería de interior.
De lo que se deduce que un buen ministro en ese ramo romo ha tener pocas luces. Sin embargo, aún hay quien lo tilda de iluminado. Lo hacen por su pasión por el santoral. Es un hombre de fe, solo eso, por qué no pensarlo, tanta que no duda en conceder condecoraciones a sus criaturas celestes como si fuesen élite de brigada policial. Estábamos en la duda de si sería más iluminado que oscuro o viceversa cuando nos alcanza la noticia de que el bueno de Díaz departió con el director de la Oficina Antifraude de Cataluña. Y que en la conversación quitaron y pusieron presidentes, alentaron sospechas, ignoraron lo delictivo, y delinquieron hasta en lo afectivo. Ambos salieron de allí con la clara percepción de haber prestado un gran servicio a la patria.

Interior

Te puede interesar