Políticos presos

Ni estamos regresando al fascismo, ni los ex-consellers de la Generalitat encarcelados son presos políticos, porque no es lo mismo reprimir a los demócratas que aplicar la Ley a los políticos que violan una legislación democrática, por mejorable que esta sea. 
Recordemos que en 2005, el ex-lehendakari Ibarretxe usó los cauces legales para que Euzkadi fuera un Estado Libre Asociado con derecho de autodeterminación; su plan fue presentado en el Congreso de Diputados, se debatió, se rechazó educadamente, y nadie fue a la cárcel.
Parecía que la aplicación blanda del artículo 155 era suficiente para reconducir la situación, pero las detenciones han reventado esta estrategia de distensión. La posible sobreactuación de la jueza Carmen Lamela, ha creado de manera innecesaria unos mártires que condicionarán emocionalmente la votación del 21-D, precisamente cuando el process ha descarrilado.