Palos en la rueda

La economía española sigue como un tiro. El INE acaba de publicar los datos de PIB del segundo trimestre y arroja una cifra aún mayor de lo esperado. El crecimiento del PIB fue del 0,9 por ciento y además es equilibrado en todos sus componentes. Sube el consumo, pero también la inversión, sobre todo en bienes de equipo, la construcción, con el efecto arrastre que conlleva para otros subsectores y las exportaciones. La tasa interanual se sitúa ya en el 3,1 por ciento, sumando quince trimestres en positivo. Y el empleo aumenta a un ritmo del 2,8 por ciento. Las previsiones del Gobierno, según el ministro De Guindos, se acercan ya al 3,5 por ciento para este año, así que no descarta volver a modificar al alza las previsiones.
El ministro también destaca, y así lo confirman los datos, que el crecimiento no solo es equilibrado sino sano. Hay aportación importante del sector exterior, la balanza de pagos por cuenta corriente lleva cinco años en positivo... En definitiva, la economía va por un excelente camino. Pero, ahora vienen las dos preguntas que muchos se hacen. Una que tiene todo el sentido y que se refiere a si podríamos estar creciendo más si se hicieran más reformas.
Y dos, la que le gusta a la izquierda, una vez que ya no se puede negar que hay más empleo y más riqueza, es si está llegando a los ciudadanos. Pregunta retórica, diría yo, que tiene más que ver con la necesidad de la izquierda de mantener el discurso catastrofista para seguir atrayendo a su parroquia. Es obvio que la recuperación está llegando a los españoles y se ve en los viajes, las casas, las hipotecas, las compras...
Tan obvio como que aún hay muchos desempleados y que si la legislatura acaba prácticamente en blanco para las reformas, el crecimiento y el empleo no podrían ir más deprisa. Parece que los tiros no van por ahí. Al contrario, la oposición está por poner palos en la rueda. El otoño puede ser calentito.

Palos en la rueda

Te puede interesar