La Marea sorprende con su segunda marcha atrás

los cimientos de María PIta temblaron con fuerza y el cielo estuvo a punto de abrirse rasgado por un rayo cegador. Por segunda vez el mareante Gobierno local decidió rectificar una decisión suya. En este caso, la decisión de dejar a su albur a quienes utilizan la aplicación del teléfono móvil para pagar la tarifa de la ORA. Hace unos días se supo que estos seres, por eso de facilitar la cosa, ahorrar a la empresa el trabajo de recoger las moneditas de las máquinas y adelantar un dinero con el que la compañía puede jugar a su antojo, por todo ello, iban además a ser castigados con un 10% de recargo cada vez que recargaran su saldo. En un principio Ferreiro y los suyos miraron para otro lado y, ahora, tras la intervención misteriosa (seguro que no divina, dado el laicismo de la formación), el Ayuntamiento asumirá el coste de esas comisiones. Y todo esto después de cargarse las conferencias de los antivacunas en una feria que contaba con las bendiciones del Concello. Solo falta que reconozcan que lo de la compra del piso al afín fue un error y ya habrán completado su peregrinaje por el arrepentimiento y la marcha atrás.

La Marea sorprende con su segunda marcha atrás

Te puede interesar