La despedida de quien pudo ser y no lo fue, pero que es de la casa

caparrós, aquel entrenador que sufría un extraño problema hematológico, pues su sangre pasó en dos años de blanquiazul a rojiblanca, se llevó a Juan Domínguez a una concentración de pretemporada y fue como si hubiese nacido el nuevo Fran. Años más tarde ese nuevo Fran no acababa de explotar y Lotina estalló: “Chuta desde el borde del área y la pelota no llega a la línea de gol”. Tampoco era para tanto. Es verdad que no era el nuevo Fran, pero tampoco un matado. Lo demostró el año de Fernando Vázquez, en el que fue nombrado el mejor centrocampista de Segunda. Ahí prácticamente se acabó todo; el futbolista de Pontedeume o de Narón –menudo misterio su origen– fue perdiendo protagonismo hasta que ayer se desvinculó del Deportivo. ¡Que le vaya bien, que es uno de la casa! FOTO: juan domínguez | quintana