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martes | 16 abril | 2024
La conselleira de Medio Ambiente, Ethel Vázquez, y el Valedor do Pobo, José Julio Fernández, firmaron ayer un convenio en materia de ejecuciones hipotecarias bajo el compromiso de a crear un marco de intercambio de información con la finalidad de mejorar la atención a las familias afectadas por desahucios.
En conferencia de prensa, tras la firma del convenio en la sede de la institución del Valedor, la conselleira insistió en la preocupación que mantienen ambas instituciones por garantizar “un derecho constitucional” como es el de una vivienda digna.
A través de este convenio, se pretende ofrecer una solución “lo más rápido posible” a las personas que padecen este problema, con el objetivo de que todos tengan acceso a una vivienda.
personas en riesgo
“No estaremos satisfechos mientras una sola persona corra el riesgo de perder su vivienda”, subrayó Vázquez.
En ese sentido, la conselleira destacó que una vez realizadas investigaciones en los casos de desahucios se detectó que existe un gran desconocimiento de los programas de ayuda que ofrece la Administración pública.
Para subsanar esta falta de información, la Xunta estableció una ronda de contactos para abordar este problema con organismos cercanos a la ciudadanía, como el propio Valedor o la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp).
Por su parte, el Valedor do Pobo procederá a dar traslado de toda la información correspondiente a quejas o consultas recibidas en esta materia, ya que también ha lamentado la “insuficiente” información que recibe la ciudadanía sobre actuaciones y medidas desarrolladas por parte del Instituto Galego de Vivenda e Solo, lo que se pretende mejorar mediante la “sinergia” de los poderes públicos, dijo.
Fernández admitió que los desahucios hipotecarios es un tema preocupante en Galicia, pero insistió que por el momento lo es “aquí, en Estados Unidos y en Alemania”, y por ello valoró avances “paso a paso” que tienen lugar en esta lucha.
El Valedor do Pobo destacó también la labor efectuada en esta materia, puesto que de los doscientos desahucios que llegaron en el año 2014 a su institución en busca de ayuda, ninguno llegó a hacerse efectivo, “todos permanecieron en su casa”, celebró.
