Los trabajadores de Masol impugnan el ERTE aplicado de forma “unilateral” por la firma

Los representantes de los trabajadores de la planta ferrolana de Masol Iberia Biofuel presentaron ayer en el juzgado ferrolano la demanda de impugnación contra el ERTE que la firma ha comenzado a aplicar de forma “unilateral”, sin el acuerdo de la parte social, y que afecta a 27 de los 32 empleados que configuran la plantilla actual.
Los trabajadores justifican su oposición a esta medida en la ausencia de documentación e informes técnicos externos que avalen la razón esgrimida por la firma para ejecutar el expediente. “Os argumentos da empresa son produtivos. Din que esta planta –tiene otras dos, una en Cartagena y otra en Castellón– é a que máis lonxe queda dos posibles clientes finais, que agora mesmo se atopan na zona do Mediterráneo, pero é unha medida que non xustifican nin con documentación nin con ningún informe que explique por que esta decisión só se toma coa planta ferrolá”, comentó ayer Modesto Vázquez, delegado sindical por la CIG.
Trabajadores de la factoría ubicada en el puerto exterior de Ferrol se concentraron ayer delante del Concello de Ferrol con el fin de denunciar la aplicación del ERTE pero también “la falta de interese, abandono e silencio” por parte de las autoridades locales a esta situación. “Levamos tres meses intentando loitar contra a decisión desta empresa, que a día de hoxe non contempla outra postura que a de implantar o ERTE e que non ten visos de traer ningún tipo de carga de traballo para esta planta”, explicó Vázquez. Las otras dos, aseguró el delegado, están produciendo con normalidad. Ambas fueron sometidas a las modificaciones oportunas para poder seguir siendo competitivas en el mercado actual, lo que la parte social reclama también que se haga en la ferrolana.

vetados
El representante de los trabajadores criticó también el hecho de que “a día de hoxe se nos está apartando de calquera medida ou solución que queremos achegar para poder salvar a situación”. Precisamente ayer tuvo lugar una reunión entre el director general de Masol Iberia Europa y el director xeral de Industria de la Xunta de Galicia a la que la parte social fue vetada, según denunciaron ayer. “Foi unha reunión que nós promovimos para involucrar tamén á Xunta como parte activa, xa que nesta planta se investiron recursos público, e agora se nos veta”, afirmou.
Las críticas del personal de la planta de biodiésel concentrado ayer en Armas fueron a parar también al alcalde de Ferrol, al que lamentaron su incapacidad para aprobar una moción que incluyera las propuestas de los trabajadores para salvar la planta, y que requerían “certas medidas activas por parte dos gobernos do Partido Popular”, dijeron.