La réplica de la carabela “Boa Esperança”, una oportunidad para revivir la historia naval

Los ferrolanos disponen tan solo de hoy y mañana para acercarse a una parte indispensable de la historia universal de la mano de la réplica de la carabela portuguesa “Boa Esperança”, que en la jornada de ayer arribó al puerto local en el marco de una gira que realiza por diversas ciudades europeas junto a la española “Nao Victoria” bajo el epígrafe “Barcos de los descubrimientos”.
La iniciativa permite dar a conocer al público en general las características de estos buques construidos a caballo entre los siglos XV y XVI y que protagonizaron algunas de las principales gestas de la época de las grandes navegaciones y exploraciones. La “Boa Esperança”, comandada por Bartolomé Díaz en 1488, fue la primera en doblar el cabo de Buena Esperanza, abriendo de este modo la ruta oriental hacia India y Oceanía con el fin de optimizar el comercio de especias y artículos exóticos como la seda o la porcelana, hasta ese momento únicamente posible mediante rutas terrestres. Bélgica, Países Bajos, Alemania, Francia e Inglaterra han sido los países en algunos de cuyos puertos han recalado hasta ahora ambos navíos.
La réplica de la “Boa Esperança” fue realizada siguiendo técnicas tradicionales de construcción por carpinteros de ribera portugueses. Con una eslora de tan solo 24 metros, los visitantes pueden hacerse una idea de las duras condiciones de navegación de la época en unos navíos que, aunque de apariencia frágil, constituyeron todo un adelanto en su momento para seguir las rutas transoceánicas. Se puede visitar de 10.00 a 20.00 al precio de dos euros los adultos y 1 los niños y jóvenes de hasta 20 años.