Una vez superado el tema de la aprobación de la tasa de agua –se prestaba el servicio de saneamiento sin repercutirlo a los ciudadanos– y al margen de que todavía haya que ajustar las cifras y resolver el problema del convenio con el vecino municipio de Narón, el ejecutivo local de Jorge Suárez tiene todavía muchos frentes abiertos que pueden generar nuevos conflictos.
El servicio de recogida de basura y limpieza viaria que presta la empresa Urbaser se encuentra sin contrato desde el inicio del mandato. El gobierno popular inició a finales de su cuatrienio de gobierno la licitación del servicio para la gestión de los servicios públicos de recogida y transporte de residuos sólidos urbanos y selectivos y limpieza viaria de la ciudad, al concluir el que estaba en ese momento en vigor.
Con la llegada de Jorge Suárez a la Alcaldía se prometió una remunicipalización del servicio como el primero de una lista que se querían pasar a manos públicas. Los por entonces socios de gobierno –FeC y PSOE– ya discrepaban en aquel momento y si bien ambos proponían un servicio municipal, el grupo socialista consideraba que el de recogida de basura era bastante complejo para ejecutar, como pretendía FeC, en primer lugar. Pasados dos años y medio no se ha remunicipalizado ni cuando proponía Ferol en Común ni en los plazos que barajaba el PSOE, y nada apunta a que en este mandato, la recogida de basura sea pública.
Además del incumplimiento de la promesa electoral, lo más importante son las repercusiones que podría tener la situación actual. El contrato en marcha fue paralizado y no está resuelto, aunque el alcalde, Jorge Suárez, aseguró en su día que no estaba prevista ninguna indemnización al respecto. Entre tanto, el Concello de Ferrol abona a Urbaser el servicio que presta a través de facturas que son aprobadas en los plenos en lotes a través de modificaciones de crédito, pendientes, en todo caso, de recibir el visto bueno de la corporación para poder efectuar los pagos.
Lejos de solventar el contrato para Ferrol, el ejecutivo se ha embarcado en una nueva propuesta, a través de la Mancomunidade de Concellos de la Comarca de Ferrol, aunque, por el momento, solo Narón parece un posible socio en la idea de una prestación conjunta del servicio.
Para eso, sin embargo, todavía será preciso esperar algún tiempo y Narón concluye su contrato también a finales de este año. Si bien el ahorro que se ha determinado con la mancomunización del servicio, al que podrían ir añadiéndose otros concellos del ente supramunicipal, se estima en torno a un 12 % para los municipios, quedaría por resolver el tema del estado de la flota de vehículos, que aunque están operativos están obsoletos, qué tipo de servicio se prestaría o cómo afectaría al personal que actualmente trabaja en la prestación de la recogida.
Tanto PP como PSOE ya han llamado la atención sobre estos problemas y recuerdan, además, que el pleno no se ha posicionado sobre esta posible comarcalización del servicio. l