La sede de Navantia en Madrid está acogiendo desde el pasado lunes y hasta mañana por la tarde las tres últimas reuniones del comité intercentros para abordar el nuevo Plan Industrial y el convenio colectivo del grupo naval. La falta de acuerdos en encuentros anteriores, sumada a la intención de la empresa de cerrar ambos documentos antes de que finalice el mes para presentarlos en la última sesión del Consejo de Administración previa a las elecciones generales, llevó a convocar otros tres días de negociaciones “intensas”.
En paralelo, la plantilla de Ferrol aprobó la pasada semana en asamblea la celebración de dos acciones de protesta, una interna y otra fuera de la factoría, coincidiendo con las dos últimas jornadas de conversaciones con la empresa. De este modo, esta mañana se celebró la primera de estas acciones reivindicativas, un paro de dos horas –de seis a ocho de la mañana– en las instalaciones que contó con el apoyo de la totalidad de la plantilla. La segunda, de la cual no se ha concretado un horario, será una manifestación que recorrerá mañana las calles de Ferrol y para la que también están convocados los trabajadores de las industrias auxiliares.
Al respecto de las conversaciones que están teniendo lugar en Madrid, el secretario del comité de empresa, Miguel Pol, señaló que las noticias que tiene la parte social es que no ha habido “ningún avance”. “En lo referente al Plan Industrial aún no se ha celebrado la reunión con el presidente y la verdad es que no se prevé que hayan los suficientes movimientos como para poder avalarlo”, señaló el secretario.
En este sentido, Pol incidió en que la hoja de ruta de la compañía sigue careciendo de concreción, sin desglosar las diferentes inversiones por centros o detallar las especializaciones de cada astillero. “No se sustenta en más carga de trabajo de la que hay ya firmada, nada a mayores, por lo que tiene mala pinta que se pueda avalar así, que lo único que tiene es el compromiso de las 1.500 incorporaciones en los próximos cinco años, pero sin concretar los centros y áreas” a los que se sumarán.
En cuanto al futuro convenio colectivo, Miguel Pol lamentó que “no se están moviendo nada los textos”, aseverando que “o se le pega un empujón muy grande en lo que queda de reuniones o no habrá acercamientos y tendremos que valorar un nuevo escenario a partir del jueves”.
En cualquier caso, la parte social ya había anticipado esta coyuntura, advirtiendo semanas atrás de que habría una campaña electoral “moi quente”.