En libertad provisional dos de los ferrolanos detenidos en la macrooperación contra el hachís

En libertad provisional dos de los ferrolanos detenidos en la macrooperación contra el hachís
Familiares de los presuntos implicados durante su envío a prisión en noviembre | d.a.

La jueza titular del juzgado de Instrucción número 3 de Ferrol ha decretado la prisión provisional para dos de los detenidos en la operación “Escipión” que se desarrolló el pasado mes de noviembre en Ferrol y que sirvió para desarticular la mayor red de tráfico de hachís de Galicia.
Concretamente, esta medida cautelar afecta al padre (M.A.R.) y la novia (J.P.C.) del joven que está considerado como principal sospechoso de esta red de distribución en Ferrol (B.A.B.) y que permanece todavía en prisión a la espera de juicio.
Todos ellos, junto con otro varón vecino de Meicende –que también sigue en la cárcel– fueron detenidos y enviados a prisión el pasado 14 de noviembre acusados de un delito de tráfico de drogas y de pertenencia a banda criminal tras llevarse a cabo el registro de varios domicilios de los sospechosos en Covas y el barrio de Caranza.
Durante la llamada operación “Escipión”, llevada a cabo entre Ferrol, Arteixo y Sada, la Guardia Civil se incautó de 1,9 kilos de cocaína, 2,8 kilos de sustancias de corte y 118 kilos de hachís, 9 vehículos de alta gama y una moto de agua y 81.000 euros en efectivo. En uno de los coches registrados en Ferrol, valorado en más de 70.000 euros, se pudo encontrar un habitáculo oculto de muy difícil detección otros 70.000 euros a mayores.

También se localizó una pistola de calibre 635 con cargadores del 22, oculta en el interior de una farola dentro de la propiedad de uno de los investigados.
Ahora, una vez avanzadas las diligencias, la jueza ha decidido conceder a estos dos presuntos implicados en la trama la libertad condicional con la comparecencia periódica en los juzgados. Cabe recordar que fue en el domicilio del padre del principal sospecho, en una vivienda unifamiliar de Covas, donde los agentes localizaron oculta en una máquina expendedora gran parte de los paquetes de hachís incautados.
El que sigue en busca y captura es el hombre que las autoridades consideran el cabecilla de toda la red, contra quien existe un orden europea de arresto. La Guardia Civil calcula que esta persona recibía mensualmente unos 500 kilos de hachís, de los cuales envía alrededor de 50 al distribuidor de Ferrol para su posterior venta al menudeo.

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