Una fuga de agua dejó sin servicio la calle de la Iglesia y provocó problemas de tráfico

Operarios de Emafesa trabajaron durante toda la tarde de ayer para tratar de subsanar una fuga que se produjo en una tubería de la calle de la Iglesia y que desde la empresa mixta de aguas se atribuyó a causas “fortuitas”, sin relación alguna con los cortes que en las últimas semanas se produjeron en el Cantón como consecuencia de las obras que se están llevando a cabo en esta zona.
La avería –que  tuvo lugar durante la noche en las inmediaciones del mercado de A Magdalena– afectó al tramo de la calle de la Iglesia comprendido entre el Cantón y la calle Méndez Núñez y fue detectada por la mañana, cuando muchos abonados comprobaron que no tenían agua o padecían falta de presión. El problema quedó solventado en torno a las ocho de la tarde, cuando se restableció el suministro.
La tubería en la que se produjo la rotura no es de las más viejas de la ciudad, si bien tiene “una antigüedad media”, explicaron desde Emafesa. Precisamente los muchos años de algunas conducciones son la razón por la que suelen registrarse las averías y esto es lo que ha sucedido en las que se produjeron desde que se iniciaron las obras del Cantón. Tanto es así que se ha optado por aprovechar los trabajos para sustituirlas y evitar que puedan producirse nuevos problemas de este tipo.

semáforos provisionales
En el caso de la calle de la Iglesia, a las molestias ocasionadas a los vecinos y negocios del tramo afectado se sumaron los problemas de tráfico derivados del lugar en el que se acometió la reparación. La rotura estaba a la altura del mercado, en una zona donde se ha habilitado un doble sentido de circulación en tanto se desarrollan las obras de saneamiento de la avenida Irmandiños. Ante la imposibilidad de establecer un recorrido alternativo –a estos trabajos se suman también los de la calle del Sol– funcionaron semáforos provisionales para dar paso a los vehículos que circulaban en uno y otro sentido, lo que provocó atascos, sobre todo en determinados momentos de la tarde.
Por lo que se refiere a los usuarios, Emafesa habilitó  –como es habitual en estos casos– dos bocas de riego con grifos para poder proporcionar servicio de agua a quienes lo necesitasen con urgencia.