Cortan el tráfico en el Diapasón en defensa del transporte público

Cerca de un centenar de vecinos, apoyados por partidos políticos –BNG, PSOE, EU–, sindicatos y representantes de municipios vecinos como Narón se dieron cita ayer en la conexión entre el barrio de Esteiro y el de Caranza, la rotonda del Diapasón, donde estaba convocada una manifestación por los recortes en el transporte urbano, organizada por la federación vecinal Roi Xordo.
Durante unos quince minutos, los asistentes se distribuyeron en los dos pasos de cebra que sirven de salida y entrada a la ciudad desde Caranza, Ultramar y Narón, cruzando los viales con el fin de llamar la atención sobre la falta de un transporte público y el caos que supone la masiva utilización del coche particular.
Los participantes no fueron, sin embargo, apoyados por los conductores, que lejos de entender la protesta, no pararon de hacer sonar los claxon de los vehículos acentuando el malestar.
Esta concentración viene a sumarse a la celebrada el pasado jueves delante del Concello de Narón y se advierte de que no será la última, tras los recortes en los servicios de las líneas de Tranvías Ferrol pactados por el gobierno municipal de la ciudad naval, sin consenso con las demás formaciones políticas ni con los Concellos de Narón y Neda,  también afectados, ni con las entidades de los barrios donde se reducen líneas.
Pese al anuncio del gobierno del Concello de Ferrol de que presentará alegaciones a la propuesta aceptada en un principio y de que habrá reuniones, la federación Roi Xordo no había recibido a día de ayer ninguna convocatoria.
La presidenta de las AAVV de la zona urbana, Maite Fernández, explicó en el acto de protesta, que “no se puede consentir que el medio de transporte más caro de Galicia se reduzca ahora en servicios”. Con respecto a los criterios economicistas a los que se alega para no poder continuar con los servicios, tal y como estaban hasta ahora, la presidenta de Roi Xordo apuntó que “un servicio público no puede ser rentable económicamente sino que debe serlo para la ciudadanía, que es la que lo paga, con sus impuestos”.
La portavoz vecinal insistió en que la población está envejecida y que las conexiones con centros médicos es imprescindible “y los mayores no pueden tener que coger dos autobuses para llegar a la residencia, porque, además, perderán las citas que tienen unos horarios fijados”, añadió.
También hizo hincapié en el “caos” que supone ahora el servicio “ya que no se cumplen ni los horarios que figuran en las marquesinas de las paradas de autobuses”.
Aunque están dispuestos al diálogo y a analizar si se puede llegar a reducir algunas frecuencias, en los momentos de menos usuarios, las entidades aseguran que no aceptarán recortes sobre la situación actual, “ya calamitosa”.

ferrol vello
La reunión mantenida el pasado jueves, al término de la sesión plenaria, entre el concejal de Transportes, Pablo Cal, y la presidenta vecinal de Caranza no ha sentado bien en otro barrio de los que se ven afectados por las medidas de reestructuración del transporte, Ferrol Vello. Así, la presidenta de la entidad y también de Roi Xordo, Maite Fernández, ha criticado que se anuncie que “en un barrio como Caranza, donde hay mucha población joven, se asegure que se mantendrán las líneas, mientras que en Ferrol Vello, donde hay muchas más personas mayores, se diga que no puede haber parada porque no se contempla en la concesión con Tranvías Ferrol”. A este respecto, la representante vecinal aludió a que la parada de O Boial –que beneficia a Parque Ferrol– tampoco existía en ninguna concesión porque no había nada a lo que ir en autobús y, sin embargo, se ha creado.
Fernández considera que es evidente la división de barrios de primera y de segunda y que Ferrol Vello no solo es de segunda, sino que es de las más marginados y anima al edil a “dimitir, si dice no tener ni idea” y a la empresa “a dejar la concesión a otro si solo importa lo económico”.