La corporación municipal despide a los niños saharauis acogidos en verano

Varios miembros de la corporación municipal ferrolana, en representación de los diferentes grupos del Concello, despidieron ayer a los niños saharauis que pasaron este verano en la localidad durante un pequeño acto en el salón de recepciones de la casa consistorial.
Así, los siete pequeños –cinco niños y dos niñas– que fueron acogidos por familias ferrolanas dentro del programa Vacacións en Paz fueron recibidos por el alcalde, Jorge Suárez,  y por el resto de representantes municipales. El regidor ferrolano agradeció a las familias que participaron en el programa y también a Solidariedade Galega co Pobo Saharaui (Sogaps) su trabajo, especialmente este año en el que se enfrentaron a importantes dificultades para poder traer a los niños. 
Uno de los objetivos del programa es mejorar la calidad de vida de los acogidos, por lo que a lo largo de los dos meses de estancia, se presta atención médica gratuita a todos ellos debido al convenio de Sogaps con el Sergas. Además, evitan así la exposición a las altas temperaturas que suelen alcanzarse en medio del desierto durante este período estival.
En este sentido, las familias quisieron agradecer de forma especial el apoyo de la clínica dental Babiera y óptica Noroeste, que colaboraron gratuitamente aportando gafas graduadas y de sol para los niños y niñas, entre otras cosas.
Asimismo, durante la recepción cada uno de ellos recibió como obsequio del Concello una mochila, en la que se incluía diferente material escolar y unos libros. También les fue servido un pequeño aperitivo para compartir junto a los miembros presentes de la corporación local.

apoyo 
Por otra parte, el alcalde ferrolano aprovechó el acto para reiterar el apoyo del gobierno a la causa saharaui, abogando por un Sáhara Libre que les permita poder vivir en su territorio y moverse tanto dentro como fuera de él. 
Este año la comarca recibió a un total de 23 niños, siete de los cuales fueron acogidos por familias de Ferrol. Dos de los niños presentes en esta ocasión cumplen ya la edad límite del programa, por lo que el próximo año no podrán participar.
Por último, las familias también quisieron mostrar su agradecimiento tanto al Concello como a los ciudadanos que se solidarizan con la causa, algo que esperan que siga creciendo año tan año y empuje a nuevas familias a sumarse al programa.