Las últimas ramas de los cedros de la parte superior de Amboage caídas en el mes de septiembre hicieron saltar de nuevo las alarmas sobre el estado de estos ejemplares que no es la primera vez que, debido a su edad, dan algún susto a viandantes o vehículos estacionados. Por eso, además de renovar el sistema de anclaje que ya tenían, los técnicos del área de Jardines analizaron cómo actuar en el conjunto de los cedros.
Con la idea puesta en preservar la masa arbórea de la ciudad pero también de mantener la seguridad en la zona, desde el área de Servicios, que dirige la edil Ana Lamas se han anunciado una serie de medidas, que comenzarán a aplicarse hoy mismo y que son resultado del estudio llevado a cabo por una empresa especializada – Técnica Arbórea– que elaboró un estudio biomecánico y fisiológico en profundidad de cada uno de los ocho cedros, localizados en el lateral norte de la plaza, colindando con la calle María.
La actuación más radical será la tala de uno de los cedros, el cuarto empezando a contar por la calle Méndez Núñez.
La primera de las intervenciones se acota en los cuatro primeros cedros. En el número 1 se retirará una rama con una grieta, entre otras actuaciones. Con respecto al cuarto –que sería el primero después de las escaleras de la plaza– el informe revela que presenta un riesgo de nivel extremo ya que su capacidad de anclaje muestra graves problemas y está muy inclinado.
El estudio recomienda la tala del mismo, debido al alto riesgo de desplome que tiene. Indica, además, que no existen medidas preventivas que puedan contribuir a reducir el riesgo potencial sin desvirtuar la estructura del cedro. Además, a su estado actual se suma la localización, ya que se halla en un entorno altamente poblado y con un gran tránsito de personas.
Por eso, Lamas aseguró que “é a nosa obriga actuar e lamentablemente talar o exemplar para evitar un posible desplome”.
Los ejemplares 1, 2 y 3 se someterán a la renovación de anclajes, revisión de los ejes y a las pertinentes podas, entre otras intervenciones.
Los otros cuatro cedros de la fila de ocho con que cuenta la emblemática plaza hasta la calle Arce se someterán la próxima semana a una evaluación instrumental, lo que supone, tal y como se informó desde el Concello, realizar una tomografía sónica de los árboles con una técnica que servirá para determinar el estado del interior del cedro, evaluando la densidad de la madera.
Esta prueba se lleva a cabo con maquinaria que rodea el tronco y servirá de base para diseñar nuevas medidas para ejecutar en próximas fechas.
Tanto el arbolado de Amboage como el del Cantón se somete periódicamente a revisiones dada su antigüedad y la peligrosidad al tratarse de zonas verdes muy frecuentadas. l