Los comités de Navantia se plantan ante la posible privatización de Fene

Los comités de Navantia convocaron ayer a los medios de comunicación en el Concello de Fene para expresar desde allí su rotunda oposición a cualquier intento de privatizar la antigua Astano. Los representantes sindicales reconocen que no pueden valorar propuestas que se les ocultan, como sucede con la de Gestamp, pero se sitúan de antemano en la exigencia de que el astillero de Perlío siga siendo público y que vuelva a dedicarse a la construcción naval.
Ignacio Naveiras, presidente del intercentros y representante de CCOO, exigió información clara e interlocución con los representantes de los trabajadores. Hay que aclarar, dijo, si esa oferta de Gestamp para utilizar terrenos en Fene es compatible con el proyecto de Iberdrola y con la puesta de una quilla en la grada. Naveiras repasó los proyectos que sobrevolaron la factoría de Perlío en los últimos 25 años, desde la fábrica de vidrio y la conservera El Cisne, hasta el plan de Barreras que defendió el gobierno bipartito de la Xunta en 2006. En 2004, recordó, se produjo una manifestación histórica en Ferrol en defensa del mantenimiento de Fene dentro del grupo público Navantia y en contra de su segregación, camino que siguieron Sestao, Manises, Sevilla y otros astilleros del anterior grupo Izar, pero pese a ello “os intentos de privatización non van parar”.
La propuesta de Gestamp, de la que apenas ha trascendido que supondría una inversión de 100 millones de euros y la creación de hasta 700 empleos para la fabricación de componentes de eólica marina, llega cuando está a punto de firmarse, según la información facilitada por ambas partes, un contrato con Iberdrola para la construcción de jackets para el parque eólico marino de Wikinger.
Según pusieron ayer de manifiesto los comités de empresa, la información de la que disponen apunta a que este último encargo ocuparía la práctica totalidad de las instalaciones de Perlío y pusieron en duda, por ello, que sea compatible con una concesión a Gestamp y con la ansiada vuelta a la construcción naval. El encargo de Iberdrola, pusieron de relieve, generaría unos 500 empleos. “Pero cando só faciamos os bloques para Ferrol entraban no estaleiro máis de mil traballadores cada día, e iso que había terreos ociosos”, señaló José Rico, de UGT, que lamentó que el presidente de Navantia se jactase, en su última reunión con el comité intercentros, de no haber despedido a nadie. “Despediu a máis de catro mil compañeiros da industria auxiliar”, afirmó.
José Salceda, de MAS, remarcó que Navantia incurre en una ilegalidad al ocultar la información al comité y resumió las demandas de la parte social en “titularidad pública y que la actividad principal sea la construcción naval, civil, militar u offshore”. Cualquiera de ellas, indicó, requiere un mayor volumen de empleo que el de los proyectos de eólica marina.
Antonio Vigo, de Alternativa Independiente, criticó que “levamos trinta anos sendo campo de experimentación electoral” y Marcelo Amado, de la CIG, exigió “información e negociación” para aclarar el futuro del astillero de Fene. Participó también en la rueda de prensa Jorge Prieto, presidente del comité de Fene y representante de CCOO, que remarcó que “nunca diremos non á creación de emprego, pero ten que ser negociado cos sindicatos e no marco do plan industrial”. En su opinión, “hai un plan oculto” de la dirección de la compañía y del Gobierno. De ambos dijo que “non nolos merecemos, por inutis”.
Los comités de Navantia iniciarán la próxima semana una serie de asambleas para definir un nuevo calendario de movilizaciones.