Cándido Hermida agradece al “equipo humano” de su empresa los éxitos

La entrega de la insignia de oro de IEN por Europa a Cándido Hermida vivió su momento más emotivo con la intervención del homenajeado, que hasta en cuatro ocasiones tuvo que interrumpir su discurso ante las lágrimas y la emoción que sentía.
El empresario del sector de la madera agradeció la generosidad y el honor del galardón y recordó la ilusión que le supone formar parte del palmarés en el que ya figuran grandes empresarios de Ferrol y comarca.
Hermida dedicó todos sus éxitos al “equipo humano”, que estuvo nutridamente representado ayer en el acto celebrado en el Pazo Libunca, que lo acompaña en su trabajo, valoró a sus clientes, a sus proveedores y a toda “mi gente” que lo han seguido “y compartido mis ideales a lo largo del tiempo”, explicó con voz entrecortada. Todos, dijo, lo han llevado a conseguir, “lo que cuando era joven veía como solo un sueño”.
A sus familia y especialmente a sus hijas Natalia y Cristina –que continúan al frente de la empresa fundada por Cándido Hermida– y sus nietos también dedicó el homenajeado todo su cariño y agradecimiento porque, añadió, “constituyen y garantizan la continuidad”.
Su esposa, Isabel, recibió una mención especial por ser “el pilar de mi vida y merecedora, tanto como yo, del galardón”.
Su discurso fue muy aplaudido y el propio presidente de la Xunta animó al homenajeado a reponerse de la emoción para continuar muchos años al frente de su legado y “mirando desde a atalaia” la empresa que fundó.
La comida contó con gran asistencia de invitados, algunos de los cuales son clientes. Así, representantes de Inditex, uno de los clientes de Hermida, también se dejaron ver entre la nutrida representación.