Acuerdo entre los trabajadores y el empresario para reflotar Seaquarz

Acuerdo entre los trabajadores y el empresario para reflotar Seaquarz
Rueda de Prensa en Seaquarz antigua Privilege

La asamblea de trabajadores de Seaquarz aprobó ayer pasadas las ocho de la tarde proponer al empresario Salvador Ortí un acuerdo, que él deberá firmar pero con el que en principio manifestó a este diario su conformidad, para reflotar la empresa. Este pasa por realizar una auditoría externa y garantizar la entrada de capital, a través de la venta de toda la compañía o una inyección por parte de algún nuevo inversor, antes de que termine el plazo de un mes.
Además, en el acuerdo se establece que el empresario valenciano deberá reunirse con la representación de los trabajadores una vez a la semana a lo largo del próximo mes y que deberá dar acceso a toda la información contable de Seaquarz. Se elaborará de inmediato una lista de necesidades de la planta naronesa, para determinar cuáles son las actuaciones necesarias para garantizar que pueda alcanzar el ritmo de producción preciso y, por último, Ortí se compromete a no ratificar la denuncia que puso, en la noche del martes, contra los trabajadores. Tal como se informó ayer, los acusaba de coaccionar a su dirección general para firmar la revocación del contrato de compra de la empresa suscrito hace un año.
Apenas cinco minutos después de que terminase la asamblea de los trabajadores, el empresario valenciano declaró a este diario que “ha imperado el sentido común”. Según dijo, un buen acuerdo es aquel del que se sale “razonablemente descontento”, de manera que él dio por válido el pacto, en el que no quiso reconocer la imposición de condiciones, para sacar adelante la fábrica de tableros pétreos.

tensa reunión
Por la mañana el empresario mantuvo una tensa reunión con los representantes de los trabajadores, en la que admitió que hay posibles compradores para la planta, que ambas partes reconocen como viable y con múltiples encargos en estos momentos. Tal como se informó ayer, hace un año Ortí compró la empresa a sus trabajadores por el valor de sus participaciones, 7.000 euros por cabeza que correspondían a las indemnizaciones por despido tras el fracaso de la anterior etapa de la fábrica. Un año después, el nuevo propietario no ha abonado dicha cantidad y además la Seguridad Social reclama cerca de 300.000 euros impagados, a los que se suman 40.000 euros a Hacienda y 30.000 a la compañía eléctrica, según la información de la que disponen, hasta el momento, los 38 trabajadores.
Por otra parte, el empresario Salvador Ortí aseguró ayer a este diario que todas las deudas de Seaquarz son responsabilidad exclusivamente suya y que así ha sido aclarado ya ante la Seguridad Social, que recientemente envió un escrito a trabajadores de la planta haciéndoles partícipes de dichos incumplimientos. Tanto por parte de los afectados como del propio Ortí se insistió en que este asunto está zanjado. El valenciano aseguró que está negociando personalmente con la Seguridad Social un plan de pagos a plazos para hacer frente a los casi 300.000 euros que debe y poder atender las obligaciones tributarias de la empresa. n

Acuerdo entre los trabajadores y el empresario para reflotar Seaquarz

Te puede interesar