Elías Paz Menéndez Nuevo jugador del Balonmano cisne

A punto de cumplir 17 años, el naronés Elías Paz se encuentra en la antesala de la elite del balonmano nacional, después de su fichaje por el Balonmano Cisne de Pontevedra de División de Plata. 
El laterall derecho compartirá filas esta campaña con otro balonmanista local,  Pablo Gayoso, que viene de recuperarse de una rotura de fibras en su tobillo, conformando así un equipo pontevedrés más “ferrolterrano” que nunca. Paz, que comenzó su andadura en el Ártabro coruñés con trece años para continuar después con el Balonmano Narón –”en donde me recibieron con los brazos abiertos y una sonrisa”, comenta– hasta el pasado ejercicio, no tuvo ninguna duda en dar el salto y mudarse a más de 160 kilómetros de su familia. Y es que un tren así no pasa todos los días cuando tienes 17 años.. 

¿Cómo te llegó la oferta para incorporarte al Cisne?
-En Semana Santa fui con la selección gallega a OPorto, y ahí está como entrenador de base el del Cisne. Se había informado de las diferentes becas que ofrece el club.y tras unos días me lo ofreció y acepté casi al instante. Tenía otras opciones... Teucro, Villa de Aranda... pero cuando me lo ofrecieron así no me lo pensé dos veces.

División de Plata, beca, cerca de casa...las condiciones eran estupendas ¿no?
-La verdas es que sí. Estoy aquí en el colegio interno, las condiciones son muy buenas y estudiando muy bien, porque me quedó una –Física y Química– y la puedo recuperar bastante bien gracias a las clases que hay aquí. 

¿Y que tal la toma de contacto con Pontevecra?
-Estoy contento de que me hayan dado esta oportunidad pero fisicamente la verdad es que derrotado–rie–. Pero es lo que toca. Habrá que mejorar

El cambio tiene que ser importante entre Narón y Pontevedra...
-Sí, sobre todo el nivel de los ejercicios. La gente aquí utiliza máquinas y realiza ejercicios bastante desarrollados, y en Narón eran más los típicos, flexiones, correr...Aquí es todo más específico, viendo el rendimiento de cada jugador, y para que tengamos un buen cuerpo, bastante completo y en buena forma. 

¿Qué crees que vieron en ti para ficharte?
-Bueno, no se si está muy bien que yo lo diga pero...–rie–. Soy lateral derecho, por lo tanto zurdo y hay escasez de zurdos. Tengo buen salto y tampoco tengo mal cuerpo. Y supongo que con trabajo duro y con estos entrenadores, que son muy buenos, seguramente vieron que podía llegar alto, me imagino. Un diamante al que pulir bastante –rie–. Y yo dando el cien por cien,  a mejorar y a divertirme. Ese es mi objetivo

¿Crees que jugarás en el primer equipo?
-La verdad, es una duda que tengo. Ahora estoy entrenando con el primer equipo, es un equipo de Plata y ya el nivel se nota que es bastante elevado y habrá que ganarse el puesto. No está todo hecho. 

¿Y un poco más allá? ¿Cuál es tu visión de futuro?
-Todo el mundo tiene el sueño de ir con un equipo de Asobal. La verdad es que no tengo ningún plan. Acabar aquí los estudios, ir a la universidad... y si veo que estoy aquí contento y que no me ofrecen nada mejor, a lo mejor me quedo aquí y voy a la universidad cerca, si se puede. Si no...l o primero para mi son los estudios. Desgraciadamente el balonmano para vivir es muy difícil. Si veo que a lo que quiera dedicarme, que aun no lo tengo claro, necesito plaza, por ejemplo, en Madrid,  tendré que irme y buscarme la vida por ahí. 

Y poder jugar y estudiar o trabajar.
-Claro. Allí buscarme un equipo. El balonmano ahora mismo está en mi corazón. Mi bolsillo es lo que menos me importa. Estaría muy bien vivir de eso, pero hoy en día a mucha gente de Asobal no les llega, tienen doble trabajo. Si al balonmano se le puede considerar un trabajo, que yo creo que sí. 

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Un trabajo que Paz comenzó de la mano de Toño –ex del Teucro– en las filas de una formación herculina que finalmente tuvo que dejar. "Entre clases y viaje era mucho tiempo y tuve que cambiarme a Narón", comenta el lateral. Un preparador que tuvo gran culpa de que el naronés se iniciase en este camino de pivotes y golpes francos. 
Una culpa que comparte con el hermano de Elías, Xoán Ledo, un portero que viene de colgarse el oro con los "hispanos" en el Campeonato del Mundo junior dirimido en Argelia. "Entre Toño y mi hermano me convencieron para meterme. Y lo hice y muy contento. La verdad es que me gustó ya desde el principio". Y es que de casta la viene al galgo. l