Bea Sánchez viste al Uni de oro

Bea Sánchez viste al Uni de oro

En los cinco años que acumula defendiendo la camiseta del Star Center Uni Ferrol, Bea Sánchez se ha convertido en una de las jugadoras más queridas por la afición. Su entrega y carisma convierten a la capitana en todo un referente sobre la cancha. Fuera de ella, su faceta como entrenadora de la escuela del club y de algunos de sus equipos de base le otorga una proximidad y sintonía especial con los más pequeños de la entidad y sus familias. Ella ha manifestado en múltiples ocasiones que “sus” niños son “lo más grande” y el sentimiento es recíproco. Solo así se puede entender el cariñoso recibimiento que la pívot del Puerto de Santa María recibió ayer por parte de la familia  del Uni Ferrol tras proclamarse campeona de Europa.
Y es que, tras dos jornadas de homenajes institucionales, visita a la Moncloa, felicitaciones de grandes mandatarios y un sinfín de alabanzas públicas, a Bea Sánchez todavía le quedaba recibir un último reconocimiento, probablemente el más sincero, el de los suyos. 
Una sorpresa orquestada en apenas unas horas y en la que no importó que los pequeños hayan terminado ya las clases, que muchos estén de vacaciones, o que en el periodo estival tengan otras ocupaciones. Ni uno solo se lo quiso perder. “Tráete la medalla”, le habían pedido algunos de sus alumnos y Bea Sánchez se presentó en el pabellón del colegio de Esteiro con la medalla y un buen lote de experiencias que contarles. 
Besos y achuchones de los más pequeños anticiparon una tarde llena de emociones que tuvo su punto álgido cuando, por sorpresa, en el pabellón irrumpieron el resto de integrantes de los equipos de base del club. A duras penas contuvo las lágrimas la andaluza, abrumada por la sorpresa.
Gracias a la improvisada rueda de prensa con los jugadores como reporteros de excepción, pudimos saber que Laura Gil y Silvia Domínguez son dos de las jugadoras con las que tiene más afinidad, que a su equipo se traería a Marta Xargay, que existe gran rivalidad con Francia y que Lucas Mondelo es “muy cercano”. “A Lino le tengo mucho aprecio, pero Lucas me ha regalado esto –por la medalla–”, salió al paso cuando le pidieron que eligiese entre ambos: “Es imposible, me quedo con los dos”, zanjó. “¿Qué si pesa mucho la medalla?” ¡Qué mejor forma de saberlo que acariciándola! Y así, la presea dorada pasó de mano en mano ante los ojos atónitos de los pequeños.
Más besos, más abrazos, más risas –alguna que otra lágrima– y fotos, muchas fotos: con la campeona, con su medalla... En definitiva, con su entrenadora, la que los tuvo pegados a la televisión en las últimas semanas. La que ha bañado de oro a un club modesto como el Star Center Uni Ferrol. l

Bea Sánchez viste al Uni de oro

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